Leer, escribir, compartir

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10/12/15

Releyendo a Charles Bukowski

Título: Peleando a la contra
Autor: Charles Bukowski
Editorial : Anagrama, 1997
Págs: 538

Durante cinco décadas, los libros de Charles Bukowski fueron mordientes crónicas del lado salvaje de la vida, y le ganaron millones de devotos lectores en todo el mundo. Peleando a la contra reúne por primera vez sus mejores textos autobiográficos - cuentos, novelas y poemas -, y arroja una nueva luz sobre la vida y la obra del "poeta laureado del underground de Los Ángeles", uno de los más auténticos e insobornables escritores de nuestros tiempos.




Hay escritores que puedes releer una y otra vez, no aburren ni cansan, para mí Bukowski es uno de éstos. Y una vez más le vuelvo a visitar, relego lecturas pendientes por unos días y me sumerjo en sus páginas, gran compañero en mi adolescencia el viejo Buk.

Esta vez elijo Peleando a la contra, ¿por qué?, porque lleva un poco de toda su obra, es como un recordatorio de lo que has leído de él, relatos, poesía de sus diferentes libros publicados, a través de los cuales nos va narrando su vida a modo de autobiografía con mucho sarcasmo y mucha degradación. Los relatos no están ordenados de acuerdo a su fecha de publicación, están estructurados siguiendo una cronología en relación a su vida.

A quien llega por primera vez a la obra de este autor, sus historias le pueden parecer repugnantes, sus temas siempre son los mismos, bebida, sexo, mujeres, apuestas...Te puede escandalizar porque Bukowski no tenía pelos en la lengua decía las cosas sin adorno, sin florituras, llamando a cada cosa lo que es. Sus escritos tienen un estilo directo, trágico, violento, ingenioso, que nunca te dejará indiferente, para bien o para mal. Sus libros nos presentan una realidad, su realidad, de forma cruda. Con Bukowski no hay término medio o te gusta o lo aborreces. 

Recomiendo leerle con un boli y un cuaderno al lado porque tiene frases que no pasan desapercibidas, de esas que valen la pena subrayar.



Bukowski, (1920 - 1994) también llamado, Hank, el viejo Buk, Henry Chinaski (su alter-ego en sus novelas), nació en Andemach, Alemania en 1920, con dos años se trasladaron a Los Ángeles, donde vivió casi toda su vida. Una dura infancia marcada por un padre que no dudaba en usar la violencia contra su hijo una y otra vez, y un caso de acné extremo que le dejó marcas en el rostro de por vida y por el que tuvo que aguantar las risas de sus compañeros en el colegio y que las chicas no quisieran saber nada de él. Cuando se va de casa, comienza a vivir en hoteles malolientes, a trabajar en empleos marginales, emborrachándose, alternando con prostitutas...pero siempre escribiendo, intentando colar sus escritos en alguna revista (salvo unos años, los más duros y salvajes en su vida). 
Bukowski fue el poeta de los vagabundos, las prostitutas, de la gente que no tenía nada que perder porque lo había perdido todo, de los que se pasaban el día en las colas para encontrar un trabajo mal pagado...
Un escritor peculiar "políticamente incorrecto", pero con una escritura trepidante, vertiginosa, descarada. Como peculiares también los títulos de sus novelas y relatos, recuerdo leyendo alguno de jovencita y tapando la portada para que no pudieran ver lo que ponía. Por ejemplo La máquina de follar, Hijo de Satanás, Erecciones, eyaculaciones, exhibiciones...
No fue hasta los 50 años que pudo vivir de la escritura, su descubridor, editor y amigo al que fue fiel John Martin, le prometió 100 dólares mensuales si dejaba su actual trabajo en correos y se dedicaba a escribir. Como él mismo explicó: 
Tengo dos opciones, permanecer en la oficina de correos y volverme loco...o quedarme fuera y jugar a ser escritor y morirme de hambre. He decidido morir de hambre.
Escribió más de 50 libros, incontables relatos cortos y multitud de poemas. Hoy en día es considerado como uno de los escritores más influyentes en la literatura independiente, su obra ha sido traducida a decenas de idiomas y algunos de sus textos han llegado al cine,  Marco Ferreri dirigió "Ordinaria locura" (1981) basada en cuatro de sus relatos, "Barfly" (1987) fue la más famosa, el guión fue del propio Bukowski y la última película Factotum (2005) basada en su novela homónima.
Al final de su vida vivía en una casa en Hollywood, conducía un Bmw rojo y se casó con Linda lee, se puede decir que se acomodó en cierta manera o por lo menos llevó una vida un tanto más sosegada según envejecía. Murió en 1994.

Como ya he mencionado su vida y su obra van de la mano, si quieres conocer al viejo Buk nada como leer sus libros, todo está ahí. En La senda del perdedor, nos describe la etapa de su infancia viviendo con sus padres, el acné, como empezó a beber, como se obsesionó con el sexo. En Cartero nos adentra en los 12 años que trabajó para correos. En Factotum, nos habla de todos sus trabajos anteriores. En Mujeres, sus aventuras sexuales, en Hollywood nos cuenta los intentos por llevar sus textos al cine y Pulp, escrita poco antes de su muerte da rienda suelta a la ficción.


Para algunos puede serles repetitivo dado que los temas que te vas a encontrar en sus libros son casi siempre los mismos: borrachos, putas, drogas, apuestas...pero es que esa fue su vida y esos fueron sus compañeros de viaje, una de sus frases más recordadas dice: 
Hospitales, cárceles y putas: estas son las universidades de la vida. Yo he alcanzado numerosos grados. Llámenme señor.


Lo que más me gusta de Bukowski es su poesía, es sencillamente genial. En ocasiones bruta, áspera, desesperada,en otras más tierna, provocadora, pero que te atrae de manera desconcertante. 

Una escritura visceral y un estilo de vida, que le han traído un público entregado. Un escritor que vomita sobre la moral y la decencia.

Vidas en la basura                                                                                                                      
el viento sopla fuerte esta noche                         
y es un viento frío                                                  
y pienso en los muchachos                                           
desocupados.
Espero que algunos de ellos tengan
una botella de tinto.   

Es cuando estás en la mala
cuando te das cuenta de que
todo
tiene dueño
y de que hay cerraduras en 
todas las cosas.
Así funciona la democracia:
agarra lo que puedas, trata de mantenerlo
y agrégale algo
si es posible.

Así funciona la dictadura
también
sólo que ellos esclavizan o 
destruyen a sus
desamparados.

Nosotros simplemente
olvidamos
a los nuestros.

En cualquier caso
es un viento muy frío.

                      
                                                                                

                                                                               




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